Para verificar la identidad del equipo encuestador, se ha dispuesto la página web encuestanacional.injuv.gob.cl

Autoridades regionales dieron a conocer la aplicación de la 11ª Encuesta Nacional de Juventudes, una investigación que se realiza desde 1994 de manera ininterrumpida cada tres años y que busca caracterizar a las juventudes que residen en el país, con el fin de entregar insumos a la discusión académica y al diseño e implementación de políticas públicas.
La etapa de levantamiento en terreno, a cargo del Departamento de Estudios Sociales de la Pontificia Universidad Católica de Chile (DESUC), se extenderá hasta junio de 2025 y consiste en el despliegue territorial del equipo encuestador para llegar a personas jóvenes de 15 a 29 años, de todas las regiones del país, tanto en zonas rurales como urbanas.
Novedades y metodología
La 11ª versión de la Encuesta Nacional de Juventudes es aplicada por la Dirección de Estudios Sociales de la Pontificia Universidad Católica de Chile, DESUC. Esta se desarrolla en terreno mediante una metodología puerta a puerta, y busca que personas entre 15 y 29 años de la región aporten información a través de un cuestionario.
Respecto a los contenidos, esta nueva versión busca atender al dinamismo propio de las juventudes, incorporando preguntas sobre las labores de cuidado que estas realizan y sus efectos en la salud mental y/o trayectoria de vida. Asimismo, se han incluido interrogantes respecto a las motivaciones para no tener hijos, y por primera vez se incorporan temas medioambientales, como respuesta a solicitudes de diversas organizaciones juveniles. Finalmente, la 11ª Encuesta Nacional de Juventudes contempla además interrogantes relacionadas con inteligencia artificial, violencia ginecobstétrica, educación sexual y voluntariado.
La encuesta llegará a personas jóvenes de todo el país, considerando distintas regiones y zonas —tanto urbanas como rurales—, con el objetivo de alcanzar la multiplicidad y diversidad de realidades juveniles. Esto permitirá identificar y diagnosticar las principales brechas y problemáticas existentes, y mejorar así la oferta pública y las políticas dirigidas a las juventudes.